Mueble de pared para salón con incrustaciones de cerezo clásico Piombini.
Los acabados preciosos y las líneas esenciales aportan gracia y armonía. Una «ligereza resistente» derivada de la naturalidad y robustez del madera trabajada por hábiles manos artesanas que la han creado en los más mínimos detalles.
Al tacto es una sorpresa continua, el cuerpo parece seguir el infinito y luego, sobria, la elaboración de las puertas y del escritorio sorprende como respuesta a las necesidades de perfecta funcionalidad y fineza del diseño.
Su belleza y su estilo atemporal enmarcan las cosas más queridas, los recuerdos, las colecciones de libros y los objetos, proporcionándoles el mejor hogar que puedas buscar para ellos, llevándote así cada día a un lugar mágico.
Un vaivén continuo entre detalles minuciosos, elegante personalidad y proporciones equilibradas la hacen capaz de satisfacer las necesidades y gustos de todos. Pared de salón Arte, sumergidos en la experiencia más natural que existe.
Diseño elegante y refinado, líneas sobrias y suaves para un estilo atemporal. Minucioso y cuidadoso trabajo de la madera de cerezo y las incrustaciones (presentes solo en el acabado cerezo envejecido). Todos los acabados propuestos están hechos a mano por expertos artesanos italianos. Las puertas son de vidrio y madera.
Estructura, marcos, marcos de puertas, zócalo de madera maciza. Puertas con paneles, laterales, fondos, encimeras, tabiques, respaldos, estantes están realizados en fibra de madera chapada en madera de anegrè y cerezo, las incrustaciones están hechas de madera de boj, peral y nogal canaletto, los matices se realizan con la antigua técnica de "arena caliente". Las partes funcionales de mecanismos y bisagras están hechas de latón o aleación de zama en diferentes acabados.