Aparador clásico en madera de cerezo, una madera rica en emociones, que evoca la calidez del hogar. Las formas son elegantes y acogedoras y los acabados son preciosos y armoniosos. Una «ligereza resistente» resultante de la naturalidad y la robustez de la madera trabajada por hábiles artesanos que la han creado hasta el más mínimo detalle.
Los ojos agradecen este espectáculo coral: la belleza y la exaltación del veteado, los matices acogedores que evocan el cálido sotobosque del marrón dorado al rojo, y la singularidad de las puertas enriquecidas por el protagonismo atemperado de las incrustaciones con matices realizadas con la antigua técnica de la arena caliente.
Un armario lleno de emoción, que celebra la excelencia y lo hace perfecto tanto para la zona de estar como para la de dormir. Una continua oscilación entre detalles minuciosos, personalidad elegante y proporciones equilibradas la hacen capaz de satisfacer las necesidades y los gustos de todos.
Armario aparador Arte, inmerso en la experiencia más natural que existe.